Aplicaciones
Impermeabilizar un canal con geomembrana garantiza la estanqueidad de dicho canal de agua a largo plazo. La pérdida de caudal es un factor especialmente condicionante de los desperfectos que con el tiempo pueda sufrir la canalización, especialmente en terrenos que no presenten suficientes condiciones de impermeabilidad.
En función de las distintas variables del entorno podemos distinguir dos grandes tipologías de canales con geomembranas : Sobre tierra y sobre hormigón y dentro de este último con geomembrana vista o cubierta por un cajero de hormigón.
En el canal de tierra la geomembrana se apoya directamente sobre la excavación del terreno, previamente preparado y además intercalando un geotextil de protección . La geomembrana del canal permanece expuesta.
Suele ser el caso de Canales de pequeña entidad que comunican lagos ornamentales, o áreas de riego, en minería para recogidas de lixiviados, etc… aunque en ocasiones a nivel mundial se han dado casos de gran longitud y dimensiones para traslado de agua de riego pero son casos excepcionales ya que en la mayoría de los casos es una configuración desaconsejable para grandes dimensiones y longitudes por las imperfecciones de la sección que no está protegida con hormigón, aumentadas por su desgaste y asentamientos en el tiempo y el riesgo de que a lo largo de su recorrido pueda haber corrimientos de desmontes o taludes, socavaciones y en definitiva pérdidas de continuidad.
Al ser geomembrana expuesta tiene más riesgos externos para que pueda ser dañada su espesor debe contemplar; objetos en flotación, desgastes de los suelos, caída de objetos de los taludes, agresiones de animales, granizo, etc. Normalmente hablamos de 1,5 ,2 a 2,5 mm según las dimensiones del cajero.
En el caso del canal de hormigón sería el caso anterior pero donde el agua circula sobre el hormigón en vez de sobre la geomembrana. En este caso eliminamos riesgos de que la geomembrana sea dañada y perdamos flujo en el canal.En este caso el espesor de la geomembrana puede ser mucho menor porque su único cometido ahora es el de ofrecer estanqueidad sin apenas requisito alguno. En esta aplicación son habituales espesores de 0,75, 1 y 1,5 mm dependiendo exclusivamente de las dimensiones del canal.